Geometría y poética arquitectónica

Las curvas en la arquitectura van ha estar cada vez más de rabiosa actualidad. Creo que la industria de la construcción va a permitir un uso mucho más extenso. Voy a enumerar los tipos de superficies según su interés arquitectónico.

Las superficies más interesantes son las cóncavas. Tiene un derecho y un revés que repercute en la estabilidad estructural, acústica, en la reflexión de la luz, en la recogida de aguas, etc. Son muy difíciles de construir y por ello se procuran usar superficies esféricas que precisan menos datos para su definición. Se resuelven como porciones de una figura conocida o por aproximación de figuras aleatorias y un trazado de secciones múltiples.

Las superficies alabeadas poseen doble curvatura y su perfil es curvo. Bajo el sol el contorno curvo nos permite reconocerlas. Para facilitar su construcción suelen ser regladas y nacer de la idea de transición de una recta apoyada sobre dos líneas.

Las superficies desarrollables se pueden construir a partir de un plano doblado o plegado. O sea, sus generatrices se cortan en un punto o bien son paralelas. Su perfil es siempre una recta. Permiten el uso de láminas recortadas y son muy útiles para procesos que incluyan la prefabricación de piezas seriadas o moldes.

Las superficies planas pueden descomponer figuras complejas para reducir costes. En superficies de vidrio su uso es casi obligado.